Efémerides: Primer Cruce de la Cordillera de los Andes en Globo Aerostático

En el año 1915, Angel María Zuloaga, teniente 1º del Ejército, que con el tiempo se convertiría en uno de los grandes propulsores del desarrollo aeronáutico, y Eduardo Bradley, piloto de aviones y aerostatos, acordaron intentar por primera vez el cruce de los Andes en globo.

Recuerda Zuloaga: tuvimos especialmente en cuenta la elección del material, los antecedentes meteorológicos de América del Sur, y en particular la zona andina, imponiéndonos un plan de estudios que comprendía: dirección e intensidad de las corrientes de aire y sus propiedades físicas a diferentes alturas a partir de 5.000 metros, radiación solar, temperatura, humedad y otros fenómenos. Además, ambos tripulantes nos sometimos a esmeradas observaciones psicofísicas".

Los científicos Jorge Wiggins y H.H. Clayton, del Instituto Meteorológico Argentino; el destacado profesor del Instituto Geográfico Militar, doctor Guillermo Shulz; el especialista en medicina de aviación, doctor Agesilao Milano, y el sabio Gualterio Knoche, director del Instituto Meteorológico de Chile, colaboraron en la empresa.

Los pilotos habían considerado conveniente adoptar un globo esférico con capacidad para poder ascender por lo menos 9.000 metros, el cual debía ser inflado con gas hidrógeno, cuya fuerza ascensional es, prácticamente, de 1.100 gramos por metro cúbico.
En aquel momento ya resultaba indispensable obtener la autorización del gobierno argentino para trasladar los complejos elementos destinados a tornar factible la empresa. 

Lograda, Bradley y Zuloaga se trasladaron a Santiago de Chile, llevando consigo dos globos, uno para pruebas, de 1.600 metros cúbicos de capacidad, y el fiel Eduardo Newbery, de 2.200 metros cúbicos, para la realización del vuelo definitivo.

A las 8.30, todo estaba listo. Una atmósfera despejada y un sol radiante, luego de varios días de tempestad, les otorgaban confianza. Liberado, el Eduardo Newbery, que era sostenido por varios ayudantes, se elevó majestuosamente. Desde la canastilla, Bradley y Zuloaga recibieron el afectuoso saludo de "¡Adiós, cabezas duras!".


La gran travesía: El cruce de los Andes en globo


Luego de quince minutos el globo había alcanzado gran altura, y a los 6.500 metros, los pilotos recurrieron al uso de oxígeno, mediante el empleo de caretas especiales. Otros 500 metros, y entraron en una corriente huracanada, en dirección a la Argentina. Se hallaban en plena cordillera. "Sentimos la emoción indecible de ver deslizarse a nuestros pies la parte más alta de la cordillera, con su inmaculado manto de armiño y sus dos gigantescos vigías: el Aconcagua y el Tupungato".

Poco después, ya sobre las nieves perpetuas, con la sola perspectiva del triunfo o la muerte, se vieron obligados a lanzar todo el lastre, y luego las provisiones de boca, el revólver, las municiones y el instrumental científico, con la sola excepción del barógrafo registrador de altura y temperatura, que había sido sellado por las autoridades chilenas y colocado sobre sus cabezas en el aro del globo: "Navegábamos en las regiones silenciosas de la alta atmósfera, carente de polvo, sin luz reflejada.

Recibíamos la luz directa y viva de un cielo azul y opaco. El espectáculo exaltaba nuestras almas. En presencia del espacio infinito, teníamos la sensación de acercarnos a Dios, y suspendidos allí entre el cielo y las nieves eternas, pensábamos en la tierra con vida y con la animación del hombre y nos parecía ahora otro mundo".

Mientras alcanzaban los 8.100 metros y soportaban una temperatura de 33º bajo cero, dejaban atrás los dos picos colosales y contemplaban el acogedor valle de Uspallata, con sus arboledas y su río.
A pesar de la pérdida de los elementos indispensables para un descenso normal, lograron aterrizar a las 12, hora chilena, al borde de un abismo, peligrosa situación de la que los sacaron algunos valerosos criollos llegados en mula desde Uspallata con el ingeniero Sorkin, del Ministerio de Obras Públicas, a la cabeza.

Poco más tarde, los Andes fueron sobrepasados una y otra vez por los aeronautas argentinos, pero la proeza de Bradley y de Zuloaga quedó registrada, por sus características, entre las más notables de su época. La bandera celeste y blanca, con un sol pintado en la franja del medio, que los acompañó, preside la sala "Angel María Zuloaga", de la Academia Nacional de la Historia, donde se conservan su extraordinaria biblioteca especializada y otros objetos que evocan sus esfuerzos y hazañas.[1]



[1] LA GACETA Literaria. El primer cruce de los Andes en globo- BUENOS AIRES. http://www.lagaceta.com.ar/nota/204424/la-gaceta-literaria/primer-cruce-andes-globo.html. Recuperada 19.06.16

Visita escolar con motivo de la Semana de la Bandera

La bandera celeste y blanca señala la pertenencia al nuestro suelo argentino. La Bandera que acompañó a Belgrano en la campaña del Norte, es una de las banderas más antiguas que todavía se conservan. Manuel Belgrano la enarboló por primera en 1812, y luego fue adoptada oficialmente por el Congreso de Tucumán en 1816.

Acompañadas/os por sus docentes provenientes de Rosario del Tala (Entre Ríos) poniendo entusiasmo en conocer el Museo del L.A.M. y la Sala del Liceísta, el día 16 de junio recibió a éste hermoso grupo de 61 alumnas/os de la Escuela Primaria Domingo Faustino Sarmiento.

La Brigada Museo les dió la bienvenida y oficiaron como guías de museo, contando acerca de la historia de la aviación, la aeronáutica argentina poniendo especial atención en los Primeros Abanderados que están retratados en fotos enmarcadas en la Sala  y también quienes con honor siguieron portando la Bandera Nacional año a año.

También visitaron la Sala Islas Malvinas, donde el Juramento a la Bandera cobra su mayor relieve a través de nuestros héroes, veteranos y veteranos quienes cumplieron  fielmente su promesa sirviendo a la Patria hasta entregar su vida, como fue requerida en su defensa en el conflicto armado del Atlántico Sur en el año 1982.

La bandera, en su más alta significación, es el símbolo de nacionalidad y representación de la Patria; y en las Fuerzas Armadas, símbolo de lealtad y preciado emblema de las virtudes militares.

La promesa a Nuestra Bandera acrecienta el amor a la Patria, conmemora los valores de justicia, respeto y libertad que muchos hombres y mujeres defendieron incansablemente. 

No solo se trata de una promesa de palabra, sino de un compromiso con hechos cotidianos para el bien común.

Referencias:

https://museos.cultura.gob.ar/actividad/banderas-argentinas/. Recuperado 13.06.22

https://museohistoriconacional.cultura.gob.ar/noticia/las-banderas-de-macha/ Recuperado 13.06.22

Obra de arte en memoria del héroe rosarino de Malvinas: Alférez Alfredo Vázquez

"Mis pinturas son figurativas pero tienen relieve...", expresaba el artista rosarino Nassivera.
"Sobre estas texturas táctiles aplico colores acrílicos,  son tridimensionales."

Alberto Nassivera, egresado de la Escuela de Artes Plásticas Pintor Manuel Musto, es un apasionado y talentoso artista comprometido con Malvinas. En ocasiones anteriores, ya ha expuesto su colección de pinturas  denominada: “AZUL UN ALA”- Episodios de la Batalla Aérea en Malvinas en la ciudad que lo vio nacer.

https://plus.google.com/+AlbertoNassivera
Esta colección compuesta de ocho pinturas históricas tridimensionales fue un homenaje a nuestros valerosos héroes, los pilotos argentinos que combatieron en el Atlántico Sur. Algunos de ellos han podido relatar sus misiones de combate,  y otros, aquellos 38 aviadores y 6 tripulantes, murieron en acción y quedarán  para siempre en nuestra memoria, como héroes nacionales.
En estos años hubo innumerables demostraciones de admiración por el desempeño de nuestros pilotos en ese conflicto,  tanto de propios, adversarios, como neutrales, resaltando su profesionalismo y  valor.

Al respecto, quizás una de las más famosas sea la de Pierre Closterman, un as francés que combatió en la Segunda Guerra Mundial en filas de la propia Royal Air Force, quien escribió: “Vuestro valor ha deslumbrado no sólo al pueblo argentino, sino que somos muchos los que en el mundo estamos  orgullosos que seais nuestros hermanos pilotos. A los padres y a las madres, a los hermanos y las hermanas, a las esposas y a los hijos de los pilotos argentinos, que fueron a la muerte con el coraje más fantástico y más a asombroso, les digo que ellos honran a la Argentina y al mundo latino.”


La ardua tarea investigativa abarcó numerosos aspectos, que han permitido reflejar lo más fielmente posible las circunstancias que atravesaron, combinando características: técnicas, geográficas, climáticas, y morfolóficas entre otras, para recrear esas misiones.
En las distintas obras, se pueden ver: El primer contacto con la fuerza de tareas británica, llevado a cabo por un Boeing 707; el derribo de helicópteros por parte de los “Pucará”; el lanzamiento de “Exocet” desde aviones “Super Etendard”; el reabastecimiento en vuelo desde un “Hércules”; un riesgoso rescate en el mar con un helicóptero del Ejército; un combate aire –aire entre “Dagger” y “Harrier”; un avión de entrenamiento atacando una fragata y al héroe rosarino Alfredo Vázquez en su última misión.


Foto: https://es.wikipedia.org/wiki/Alfredo_Jorge_Alberto_V%C3%A1zquez















Estas ocho  pinturas fueron realizadas, durante el año 2014.
Las obras, de 1,20 m. x  75 cm, fueron confeccionadas sobre tabla, con el agregado de material diverso, que logró un relieve o textura táctil. Encima de estos volúmenes se aplicaron colores acrílicos, con lo que se completó la textura visual, logrando una combinación entre los bajo relieves y la pintura propiamente dicha, que produce una serie de efectos muy particulares sobre el observador.

Cada una de ellas demandó entre 80 y 90 horas de trabajo para su concreción. Todas se encuentran encuadradas, en fina terminación.
Por todo lo expuesto, es motivo de agradecimiento hacia Alberto Nassivera y un gran orgullo institucional que  el cuadro correspondiente al Héroe de Malvinas Alférez Alfredo Jorge Alberto Vázquez, pase a formar parte del patrimonio del Museo Pedagógico del L.A.M.

1   http://notizap.com/mas-secciones/cultura-y-espectaculos/1986-20150407-azul-un-ala-coleccion-de-pinturas-de-alberto-nassivera.html. Recuperado 8.6.16
2     Alfredo Jorge Alberto Vázquez (Rosario, 8 de noviembre de 1957 -Fitz Roy, 8 de junio de 1982), fue  piloto militar argentino que con el grado de alférez de la Fuerza Aérea Argentina falleció en el ataque aéreo de Bahía Agradable ―acción de combate realizada durante la guerra de las Malvinas― cerca de la aldea Fitz Roy, sobre Bahía Agradable (en la isla Soledad) mientras pilotaba un Douglas A-4B Skyhawk.
Fue ascendido posmórtem a teniente y condecorado posmórtem con la Medalla al Valor en Combate por ley n.º 25.576 del 11 de abril de 2002.  El gobierno argentino por ley nacional Nº 24.950/98 lo incluyó en el listado de los "héroes nacionales", fallecidos en combate en la guerra de las Malvinas.
 
 

Efemérides: El Escuadrón Fénix y su Bautismo de Fuego en Malvinas

El Escuadrón Fénix había sido creado en 1978, en el marco del conflicto con Chile, pero tuvo su Bautismo de Fuego en el conflicto armado del Atlántico Sur, en 1982.

Estaba integrado por los aviones Lear Jet 35A, los cuales se los llamó “los obreros distrayentes”. Estos no eran aviones de caza,  ¿Y qué hacían en la guerra? Una de sus misiones era realizar acciones de engaño, simulando ser aviones de combate.

Este grupo cumplió 153 misiones efectuando tareas de reconocimiento, simulación de aviones de combate, diversión (desgaste de sistemas defensivos enemigos) y navegación al blanco. Además efectuó más de 180 misiones de exploración y reconocimiento en zona del continente.

El día 7 de junio partieron en misión de reconocimiento y relevamiento fotográfico en dos Lear Jet. Debían corroborar si los ingleses estaban construyendo una pista de aterrizaje para sus aviones. 

Un misil Sea Dart  lanzado desde el destructor inglés HMS Exeter, cuando sobrevolaban a 12.000 pies sobre el estrecho de San Carlos derribó al Lear Jet.


Los restos cayeron en la isla de Borbón al norte de la Gran Malvina. Mueren en combate el Vicecomodoro Rodolfo Manuel de la Colina, el Mayor Juan José Falconier; el Capitán Marcelo Pedro Lotufo, el Suboficial ayudante Francisco Tomás Luna, y el Suboficial auxiliar Guido Antonino Marizza. De la Colina, cabeza del escuadrón Fénix, tenía 42 años, fue el oficial de mayor edad que cayó en combate. Había elegido ir a la guerra a pesar de su rango y su edad. Hubiese podido delegar la tarea pero escogió aportar su conocimiento, su experiencia, su ejemplo y valor.

La Sala Islas Malvinas cobija el uniforme de servicio de uno de los integrantes de la tripulación:  Mayor (PM) Marcelo P. Lotufo. quién  era oriundo de Salta. 

Unidad de origen: II Brigada Aérea - sistema de armas: Lear jet lr-35. Junto a su uniforme, donado por su esposa se acompañan fotos de su familia y un Santo Rosario.





General Manuel Belgrano

El 3 junio de 1770, nacía en Buenos Aires,  el General  Manuel Belgrano.
La madre de Manuel Belgrano era María Josefa González Casero, nacida en la ciudad de Buenos Aires, de familia procedente de Santiago del Estero.
Su padre, Domingo Belgrano y Pérez, tal como firmaba, era de origen italiano, oriundo de Oneglia, en Liguria. Era un comerciante autorizado por el rey de España para trasladarse a América y había llegado a Buenos Aires hacia 1753.

Figuró entre los comerciantes opulentos que se empeñaron en lograr el establecimiento del Consulado de Buenos Aires, del cual Manuel iba a ser su Secretario. El hecho de que su familia tuviera como jefe a un ligur hizo que la familia Belgrano, a diferencia de las típicas familias de origen español de su tiempo, estuviera exenta de un fuerte patriarcado.

Los Belgrano poseían más libertad de acción, y esto posibilitó una mayor amplitud de actividades y de criterios que tuvo su máximo exponente en Manuel Belgrano.
Tuvo quince hermanos —dos de ellos sacerdotes— entre los cuales se destacaron como patriotas Francisco, Joaquín y Miguel Belgrano.

Manuel Belgrano fue un destacado Estadista y Paradigma del Funcionario Público.
Fundador de las Academias de Náutica, Dibujo y Matemáticas.
Pionero de la Educación Pública.
Promotor del Rol Social de la Mujer.
Fomentó la Agricultura, animó la Industria y protegió el Comercio.
Economista político, Periodista, Ecologista y Abogado.
Protector de los Pueblos Originarios y Primer Constitucionalista.
Prócer de la Independencia Hispanoamericana.
Precursor del Panamericanismo.
Creador de la Bandera Nacional.
Padre de la Patria.

Las imágenes que acompañan la nota corresponden al Busto en honor a nuestro prócer, donado por el Banco Provincial de Santa Fe en el año 1980.
Desde su donación estuvo emplazado en la Plaza de Armas, hasta noviembre del 2020.
A partir de esa fecha fue trasladado al Patio Gral. José de San Martín del L.A.M.
El busto construido en metal, tiene una dimensión de 73 cm. de alto por 68 cm. de ancho y una profundidad de 28 cm. 


A continuación se anexa una parte del primer párrafo de su autobiografía:

“Nada importa saber ó no, la vida de cierta clase de hombres que todos sus trabajos y afanes los han contraído a sí mismos, y ni un solo instante han concedido a los demás; pero la de los hombres públicos, sea cual fuere, debe siempre presentarse, o para que sirva de ejemplo que se imite, o dé una lección que retraiga de incidir en sus defectos. Se ha dicho, y dicho muy bien “que el estudio de lo pasado enseña cómo debe manejarse el hombre en lo presente y porvenir”; porque, desengañémonos, la base de nuestras operaciones, siempre es la misma, aunque las circunstancias alguna vez la desfiguren......"


Fuente: Semblanza Biográfica de Manuel Belgrano. Instituto Nacional Belgraniano. recuperado 13.02.2020